Protector térmico para el hogar: ¿merece la pena hacerlo uno mismo?
Protector térmico para el hogar: ¿merece la pena hacerlo uno mismo?
¿Sabes la importancia de usar un protector térmico antes de usar una plancha de pelo, Babyliss y secador? Tienen la función de mitigar los efectos del sobrecalentamiento de estos dispositivos. También ayudan a hidratar y dar forma a los cables. ¡Y hay más! Reduce el encrespamiento, repara las puntas, ayuda a desenredar el cabello y mejora la manejabilidad y el brillo.
El uso de un escudo térmico, o activador de calor, crea una capa de protección entre el elemento calefactor y el alambre, para evitar o reducir el daño por las altas temperaturas de la plancha o la secadora. Por eso es tan necesario.
Contienen sustancias que te permiten crear una especie de película protectora sobre el cabello. Entre ellos se encuentran siliconas, principios activos naturales (aceites, entre otros) y una mezcla de elementos activos destinados a mantener el equilibrio de hidratación de la fibra capilar.
Protector de calor para el hogar x Listo para usar
Hay muchos productos de alta calidad en la industria cosmética que afirman ser protectores contra el calor y mejorar el efecto del cepillado de dientes. Y aunque a diario invaden Internet muchas recetas caseras de preservativos térmicos, él prefiere productos que hayan sido debidamente probados y aprobados por el organismo correspondiente.
No recomiendo usar recetas caseras, ya que pueden conllevar el riesgo de reacciones adversas. Además, existe riesgo de contaminación por mala higiene y también al manipular y preparar estas recetas.
En general, el uso incorrecto de los productos, incluso excesivo, provoca numerosos daños. Puede causar, por ejemplo:
- folículos pilosos obstruidos
- exceso de aceite
- Hilos secos y deshidratados
- pérdida de brillo
- Gotas
- alambres quebradizos y
- Trastornos del cuero cabelludo incluyendo reacciones alérgicas, sensibilización y ardor del cuero cabelludo.
En otras palabras, ¡puede ser contraproducente!
cuidado adicional del cabello
Recuerda también que es buena idea prestar atención a la temperatura del dispositivo, incluso con protectores térmicos. Esto se debe a que la frecuencia, la temperatura y el método de secado pueden cambiar la forma, el color, la sequedad y causar aspereza, dañando así la fibra capilar.
En el caso de las secadoras, la temperatura ideal dependerá de cuántos vatios tenga el electrodoméstico. También es necesario tener en cuenta tu tipo de cabello, si tiene un proceso químico y también el método de uso del dispositivo.
Para evitar daños, como daños en la piel o la corteza, las temperaturas no deben superar los 95 °C. También se recomienda mantener una distancia media de 15 cm del cabello.
En el caso de una plancha, procura no superar la temperatura de 180°C.
Otra indicación es utilizar estos aparatos preferentemente con el cabello limpio, sobre todo cuando se trata de planchas, y evitando que los hilos estén mojados o húmedos ya que esto acelera el daño. Su uso requiere cuidado y moderación, es decir, olvídate de las exageraciones.
También se debe tener en cuenta que el cabello que ha sufrido procesos químicos y aquellos que ya han sido dañados por factores internos o externos son más vulnerables y no pueden soportar el calentamiento y el estiramiento diarios. Sería, por ejemplo, como si estuvieras «freyendo» los cables todo el tiempo. ¡La factura definitivamente llegará!
Por eso, quienes abusan constantemente de estos recursos deben recurrir a la hidratación semanal o quincenal para restaurar la humedad del cabello y así resistir la sequedad, el quiebre y la caída. Sin embargo, el cabello sano tiende a tener más resistencia, independientemente de la raza, el color o el largo del cabello.