¿Por qué la contaminación del aire acelera el envejecimiento de la piel?
¿Por qué la contaminación del aire acelera el envejecimiento de la piel?
Cuando pensamos en la contaminación, pensamos en sustancias tóxicas, suciedad y otros efectos nocivos. En el caso de la piel, la contaminación también puede causar daños graves, acelerando así el envejecimiento.
Para empezar, los contaminantes son sustancias que están presentes en el aire pero no en la atmósfera original. Es decir, pueden ser sustancias biológicas, físicas o químicas que modifican la composición original del aire. De esta manera, la contaminación del aire se forma a partir de los gases contaminantes emitidos por los automóviles, fábricas, etc.
De la combustión de estos gases en la atmósfera se forman partículas: fragmentos cinco veces más finos que un cabello que atacan sus capas más profundas al penetrar en la piel. Esto aumenta la producción de radicales libres que destruyen las células sanas del cuerpo.
Por lo tanto, el proceso de contacto con la piel y absorción de la contaminación da como resultado la oxidación, lo que a la larga conduce a un cambio en la composición de las fibras de colágeno, provocando la aparición temprana de flacidez y arrugas.
La contaminación también provoca el agotamiento de las defensas antioxidantes de la piel, principalmente por la pérdida de vitamina C, conocida por su capacidad para proteger la piel de factores externos y también para combatir los efectos de los radicales libres. Además, los contaminantes en el aire también ayudan a obstruir los poros, lo que contribuye al crecimiento de puntos negros y espinillas.
¿Cómo reducir los efectos de la contaminación en la piel?
Después de todo lo dicho anteriormente, y sabiendo que el aire está contaminado, rápidamente pensamos: después de todo, ¿podemos proteger nuestra piel de los efectos de la contaminación? ¡La respuesta es sí! Siguiendo hábitos sencillos, prácticos y fáciles, es posible reducir el daño que los contaminantes causan en la piel a diario, retrasando así el envejecimiento. pagando:
1. Limpieza: El primer paso imprescindible para protegerse de los efectos de la contaminación es una correcta higiene de la piel. De esta manera, no sufrirá la acumulación de suciedad. Por eso, lávate la cara con un jabón facial ideal para tu tipo de piel al menos dos veces al día: al levantarte y antes de acostarte. Si se desea, también es posible complementar la limpieza de la piel con agua micelar, por ejemplo;
2. Protección solar: La segunda, no menos importante que la primera, es la protección solar. El producto es capaz de formar una barrera protectora que protege la piel de los rayos UVA y UVB, pero también funciona para que los contaminantes no entren en contacto directo con el tejido de la piel. Por ello, utiliza diariamente un protector solar ideal para tu tipo de piel, con frecuencia de uso a lo largo del día según las instrucciones proporcionadas por el fabricante;
3. Rutina Saludable: ¿Sabías que una rutina saludable en general también contribuye a tener una piel más hermosa y ayuda a reducir los efectos del envejecimiento? ¡Si es ella! Por ello, mantén hábitos saludables, como hacer ejercicio regularmente, y procura llevar una dieta equilibrada, que incluya a diario alimentos ricos en vitamina C, E y zinc, nutrientes que ayudarán a prevenir el deterioro del colágeno de la piel.